martes, 9 de diciembre de 2014

Jaulas

Cada amanecer, iluminado por el estío y su calor, desde el patio el sultán pasea, siendo uno con las enredaderas de las pérgolas, y los duraznos floridos; y los jazmines sonrojados le acarician su cabeza. Siente en la piel, las de todas sus amantes, y recuerda cada perfume, cada vez que al deslizar las cortinas se veía salir el sol detrás de su montaña.
En esa dulce hora del alba que es magnífica para retozar, el sultán cabizbajo redola entristecido, contempla por última vez el palacio que se alza más arriba en la ladera, y escucha el río que esa noche lo ayudaría a escapar. "Quizás la pena se pierda en mí como el río en el mar, y la lluvia en el río". Y con sus palabras, el suspirar lentamente viaja hasta la noche en la cual los grillos cantan desde afuera de la sombría jaula. 
El sultán solitario se duerme pensando en ella, allí, en su cama angosta con perillas de metal. El frío lo toma en sus brazos al despertar temblando, casi como el fresco en el patio del que era su palacio, cuando al pasear con la frente en alto y el pecho gallardo, creíase dueño de la tierra. Ahora el sultán prisionero deja caer su turbante al suelo, como en tantas noches de lujuria, con la triste verdad de no haberla conquistado.

miércoles, 8 de octubre de 2014

El Vuelo

     Una tierna caricia, una caricia con decision, y el tiempo se detiene, el mundo entero se calla y contiene el aliento. Es ensordecedor el ruido del silencio. Ochenta mil corazones dejan de palpitar. Cada hombre, niño, cada mujer clava la vista, con la boca entreabierta y los ojos que se le salen de las cuencas; y va, vuela. El planeta freno sus vueltas, la lluvia se congelo en ese instante en que comenzo a girar contra las agujas, aunque en el medio, un personaje bien peinado y vestido todo de negro, atonito, sabe que en su muñeca el reloj hizo una pausa para no perderse el momento.
     Va, estrellando gordas gotas suspendidas, todas las luces le apuntan. Por cuatro segundos, paran las guerras, los aviones no vuelan, el agua no hierve. Por un instante, la gente no muere. Nada mas se mueve en todo el mundo.
     Las cuatro sombras que van barriendo el piso clavan los pies de todos. Solo un lento rotar de los cuellos acompaña el vuelo, triunfal o austero, a traves del aire inmovil. Ausente de todo, sigue su orbita curva. Velozmente recorre mas de treinta metros en un pestañeo, pero nadie pestañea. Los parpados no se atreven a moverse, mientras va.
     El final se acerca, pero solo ella, caprichosa, sabe como va a terminar, como esperando que aquel descarado que no se hubiese dado cuenta la mirara tambien, admirara su belleza, y su crueldad. Finalmente, en la Tierra en silencio, resuena un beso. Un sutil sonido metalico que alarga la agonia atragantada un momento mas. Suspira como rendida. Sonrie victoriosa, como un Dios destructor pero misericordioso, que no entrega la alegria hasta despues de hacer sufrir, y cae muerta contra la red del fondo.

martes, 30 de septiembre de 2014

La taza de té

Con los ojos cerrados
los hermanos, sentidos, se extasían
perciben el máximo, perciben el todo.
El polvo en el fondo de la taza de té, las manos sin querer entrelazadas
y la sorpresa en las bocas atenta.
La espera de saber enreda a algunos,
despierta a otros y enjaula al torpe
que no puede ver sin ver.

El polvo en el fondo de la taza de té, inmóvil por siglos cuenta las historias del desuso y del olvido. Cuando el recuerdo se hizo presente por necesidad y se sintió herido. Que decir si solo lo moldean manos ciegas que tantean esperando Dios sabe que en ese mar de cosas? Le espera la muerte o quizás el regreso a donde la porcelana jamás se quiebra, intacta, sola.  

miércoles, 24 de septiembre de 2014

Banquete

Al asomar el sol sobre el horizonte,
las calles se tiñen
con el rojo de la sangre de mis enemigos.
     Sus cuerpos adornan las puertas de sus casas,
colgados, rezumando vida, aun latentes.
     Mis ojos brillan como un relampago que ilumina el cielo nocturno,
y mi pecho arde con el calor de mil estrellas. Hierven mis venas.
     Mi garganta se ahoga de venganza.
     La escarlata baja por la carne y la madera,
las bocas de tormenta escupen ratas embadurnadas de muerte.
     El cemento de la ciudad, todavia frio,
el asfalto,
la brea,
emanan vapores hediondos
de dolor, y suciedad.
     Pequeños arroyos de sangre traidora fluyen junto al cordon de la vereda,
entre los adoquines,
arrastrando amarillentas hojas de otoño.
     Mi cuerpo esta exhausto.
     Hombres, mujeres, colgados por la nuca, empalados, vaciandose lentamente.
     Algunos pocos siguen gritando.
     Musica para mis oidos,
arte ante mis ojos.
     Bebi arena tanto tiempo para saciar mi sed,
comi tanto aire para aplacar mi hambre,
y ahora por fin estoy satisfecho.

martes, 2 de septiembre de 2014

Irónicos contrastes en la rígida conciencia









































Me veras volar 
por la ciudad de la furia 
donde nadie sabe de mi 
y yo soy parte de todos. 

Nada cambiara 
con un aviso de curvas 
ya no hay fabulas 
en la ciudad de la furia 

Me veras caer 
como un ave de presa 
me veras caer 
sobre terrazas desiertas 
te desnudare 
por las calles azules 
me refugiare 
antes que todos despierten 

Me dejaras dormir al amanecer 
entre tus piernas 
entre tus pirenas 

Sabras ocultarte bien 
y desaparecer 
entre la niebla 
entre la niebla 
un hombre aladao 
extraña la tierra 

Me veras volar por la ciudad de la furia 
donde nadie sabe de mi 
y yo soy parte de todos 

Con la luz del sol 
se derriten mis alas 
solo encuentro en la obscuridad 
lo que me une 
con la ciudad de la furia 

Me veras caer 
como una flecha salvaje 
me veras caer 
entre vuelos fugaces 
Buenos Aires se ve 
tan susceptible 
ese destino de furia es 
lo que sus caras persisten 

Me dejaras dormir al amanecer 
entre tus piernas 
entre tus piernas 

Sabras ocultarte bien 
y desaparecer 
entre la niebla 
entre la niebla 
un hombre alado 
extraña la noche



Catriel Cabrera
29/04/14
Taller literario



domingo, 6 de julio de 2014

Los trenes

¿Alguna vez se pusieron a pensar en los trenes? Hoy en dia, a la imagen del tren le falta problematizacion. Estamos muy acostumbrados. Pero no es sencillo mirar un tren. Por las vias es fugaz y lejano. En las estaciones, al contrario, demasiado inmovil y excesivamente cerca. El lugar, por lo tanto -asumiendo que hablamos de la imagen exterior- es sin lugar a dudas la terminal. Un tren en la terminal es la muerte y resurrecion de un tren. Alli se lo ve ni de muy lejos ni de muy cerca.
     Parece haber dos posibles imagenes del tren. Jugando a pensar en otra sociedad -de otro planeta, de otro tiempo, diferente- imaginemos los extremos:
     Por un lado, los trenes viejos. Oxido asomando en las esquinas resquebrajadas, de las grietas de su pintura. De metal opaco, con el brillo desgastado de lluvia y años. Ventanas de otra epoca, moho, y ruido. ¡Ruido! Un rugir de garganta cavernosa y aspera, como un titanico animal de carga, brutal, y brutalmente domesticado. Tranquilo, pero capaz de provocar una catastrofe en cualquier segundo.
     Por otra parte, existen los trenes nuevos. Doblemente imparables que los trenes trenes viejos, debido a su incontrolable velocidad. Silenciosos, exactos, temerarios, precisos. Un haz de luz, un zumbido, y cientos de hombres y mujeres aparecen de dentro de cabinas futuristicas. Capaces de invadir y hacer desaparecer una provincia entera en un solo viaje. Muestra un nivel de seguridad en la tecnologia propia que aterroriza la imaginacion y nos haria desconfiar profundamente de nuestros avances, extraterrestes, o atemporales.
      El hombre se aterroriza ante la idea de civilizaciones destructoras de otro planeta, de otro continente, de otra region. No obstante, jamas piensan estos hombres en su propio potencial. Siempre los invasores superan en numero, tecnologia y conocimientos, y solo un heroe diferente al resto puede salvar al mundo. ¿Alguna vez alguno de estos hombres se puso en la piel de un extraño viendo por primera vez a los trenes entonando su rugido metalico? La ambicion, la capacidad, la inteligencia, el poder, la aceptacion del salvajismo del hombre, aplasta todo a su paso, bajo las ruedas de los trenes.

miércoles, 25 de junio de 2014

x2

Como un velo que todo lo bueno baña, no es por él o por ella, sino por el conjunto.
Es llorar la muerte y la resurrección.
Amor es.
Amor es por siempre eterno.
Característica inherente, clausula única.
No se encuentra ni se busca, ni existe el verdadero ni su contrapuesto.

Para no explotar, porque el río corre fuerte y el fuego quema.
Porque tu mano quizás encuentra la respuesta.
Busca en cada punto una salida.
Vomito letras, creo ideas, las deformo y se diluyen,
como tinta y agua se mezclan
llevándome a donde no espero, a donde no sé, a donde no quiero.

jueves, 19 de junio de 2014

miércoles, 18 de junio de 2014

Desvarío

Sonrisas que muestran caries. Mundo.
                   Camino en reversa y cierro los ojos, te veo. Sus piernas corren, saltan, bailan, giran, se mueven. Las mías no.
   Integridad física por fuera, por dentro sólo un desabrido rompecabezas asomándose a un lunes que no llega a ser un viernes.

No estoy estando, me fui, volando lejos sobre cenizas. Pero vuelvo, vuelvo cada vez que me despierta. -Tengo miedo-.                            Reconozco esos pies fríos, ese pan duro. Recuerdo esa manta vieja y el olor a mate cocido. Pero nunca he estado aquí, jamás. No debería recordar estas cosas, pero lo hago porque no valen nada, nunca exijo nada.
Hola, me despido. Adiós, no te vayas. Nunca nos hemos visto, por eso te extrañaba tanto.

viernes, 6 de junio de 2014

La virtud de expresar indirectamente mi afirmación



¿Por qué le gusta el mes de mayo? ¿Qué tiene éste de distinto a todos los otros del año? ¿Su cumpleaños ó un aniversario importante? Al fin y al cabo es sólo una construcción inventada sobre la duración de las cosas. Pienso que quizás son los cargueros que se van del puerto, que con extrañeza los despide como si quisiera irse arriba de ellos con el tiempo. Sé que a veces se los queda mirando por horas cuando sale de trabajar ¿ó será que eso la detiene de volver a casa? ¿No quiere volver? ¿Se quiere ir? No, no la entiendo.

Entonces le gusta el mes de mayo porque vienen y se van los buques, y eso en otro mes no pasa. No es su cumpleaños, no es un aniversario importante. Es que si se queda mirando al puerto, el tiempo se sube y se va en cada barco, y ella se va con él para no volver a casa. No, seguramente no quiere volver. Sí, seguramente se quiere ir. Aunque no tan seguro, creo que ahora la estoy entendiendo.


martes, 3 de junio de 2014

"La hora de la estrella"

Funcionaba en el tiempo la máquina inmensa. Daba la hora de la estrella y todos se ponían a olvidar. Así, se desenchufaban la mente y el cosmos bailaba, danzaba y giraba; estaban juntos y solos, ¡Se volvían libres!
 Fluctuando en cualquier color vivo, respirando la vastedad del péndulo en la máquina aterradora y cautivante, que atravesaba la opacidad. 
 Como el éxtasis inesperado para el tamaño de sus cuerpos, y los pétalos sueltos desesperados e intocables rebotando en los cráneos vacíos y las pieles lamiéndose para no perder nada de sí. 
 Una nueva facilidad, íntima exclamación de estar encantado, luego tentativas de reproducir la explosión en cada acto de amor carnal, y transfigurados, desechos los cuerpos acezan con tristeza a lo invaluable.
 Sobre el encuentro de las nadas con el todo, probablemente ninguna cosa fue dada, era la hora de la estrella, una esmeralda abierta en su estuche cerrado ¿y entonces?

astros

leer y escribir
escribir y leer
me río te ríes nos reímos
te juego me juegas nos cansamos
tirados aprendemos observando
cosas
bellas                                                           
                                                         interesantes
tontas
no puede terminarse tan rápido
tan pronto
leo y escribo y no termino más
lees y escribes y el camino se expande sin horizonte
lunas de sal
soles de sol
que giran
y giro y tu giras y giramos
y rodando nos vamos amando
queriendo en el ruido 
que se siente como un mundo circular


Glándula de mentira

Movió los párpados superiores hacia abajo para que chocaran con los inferiores. Los globos oculares descansaron por un segundo, inmersos en el negro que llevaban los neurotransmisores desde los fotorreceptores al cerebro, mientras que en algún lugar de la corteza seguía buscándose un movimiento, una hormona, algo que aliviara ese dolor que lo acometía entre el silencio absoluto del consultorio, opaco como una neurona polarizada.
A nivel de la boca, las glándulas salivales, permanecieron en reposo para dejar el espacio bucal lo más grande posible para que pase con más facilidad la mentira que estaba a punto de liberar al medio externo, como para protegerla, como otra forma infructuosa de liberarse de esta aflicción, como un método para que pase desapercibida una vez salida de la laringe y del resto del sistema fonador. Él rogaba que nadie la identificara, que no lo revelara la sustancia que salía por los poros, refrigerando la epidermis desde los pies hacia la frente.
Ahora ya era demasiado el tiempo que había mantenido separados el medio externo de la córnea; esta se dejó ver, aunque en la retina, sólo se proyectaba la luz desesperada de la lámpara colgante.
Y porque se habían acabado las ideas o las hormonas o los movimientos, o porque tal vez aún no conocía aquella glándula que debía segregarla, las cuerdas vocales soltaron las cuerdas y dejaron escapar a la mentira, pero esta no salió.
Sin embargo, algo había dicho. Sorprendido, abrió grandes los ojos. Las cuerdas vocales se miraron horrorizadas, y los neurotransmisores se desvanecieron, aunque siguió viviendo.
Sonriente, el psicoanalista le dio fin a la sesión.

miércoles, 14 de mayo de 2014

Lo que no (sólo soy)

Llanto, llanto

vida luz lágrrima

soy

lágrima fría en el rostro

recorrido mojado en la mejilla.

Llanto

soy

llanto triste, permanente permanece,

DUELE.

Duele ser

yo

duele

saber que nada viene bien

me,

que la gata no decide

y la flora se marchita

se rompe

yo

rompo vidrio, rompo en llanto

irrumpo

interrumpo

charlas ajenas

por temor.

Yo

temo al miedo, temo a mí

me

temo

yo

siento miedo

frío mal dolor

y puede

puede flor flora, felino en llamas.

Llamo.

Yo

grito desesperada

desesperado grito de auxilio

yo

extraño soy

no

conozco lo que soy

no

siento

sólo me siento

sola

yo

estoy

yo





Maga Sarrugeri

lunes, 12 de mayo de 2014

lasombra


Sombra es luz, entonces todo el miedo es eso... eso que calas de grises, en todas sus gamas y variedades, y con estampados y relieves y guardas hindúes con flecos y mostacillas y lentejuelas. Y lo decoras tanto, ya no sabes que más agregarle. Cuando pegues la vuelta, hasta donde llegará el "ah, acá estabas". Te está esperando atrás del picaporte, apoyado contra el marco porque se le cansaron las rodillas, tomando un café para quedarse despierto capaz, porque irse no se va a ir, pero bueno, claro, verlo depende de donde estés.
¿Dónde estas?
Realmente en que silla te quedaste esperando, contemplando, tranquilo, como si nada pasara, mientras todo te pasa. Por al lado, abajo, arriba, por enfrente, te chifla, te tira un guiño, te jode, te pesa, se te mete en el culo, te atraviesa y lo escondes como avergonzado como si no tuvieras que sentirlo, esforzándote por ignorarlo sabiendo que esta ahí (y que no se va a ir), atrás de la oreja, silbándote, invitándote a que escuches todo eso que no queres escuchar. ¿Qué de lo que uno siente, no tiene que sentirr? ¡Todo! y sentí-te, de verdad, sin rodeos. Es eso, eso virgen inmediato que filtras rápido pensando para que se pierda, y te perdes.
Escarbado; el portazo que viene lo escucha el de planta baja. Se viene, venite. Vení dale, que acá estamos todos invitados y  te queremos ey. No seas tímido.
Ese almacén, haceme un recorrido personalizado que va a rebalsar de todo ese dulzor que está en tus ojos. Y el pudor que titila en rojo, tira patadas eléctricas de adolecenticidad.
Adolece
Dole
Duele, y sana sólo el amor inmenso. Está al lado tuyo queriéndote darte. Un beso de nube que huela como la lluvia en el bosque de color atardecer moretón y todo muera en el instante en el que los labios se separan y viendo todo blanco, sumergirnos en ese mar tibio que acaricia la espalda y volverse arrugas y después peces que nadan conociendo otro mundo. 

Suiza quizás.

domingo, 4 de mayo de 2014

jueves, 24 de abril de 2014

Un arácnido una camiseta

Hola, quería compartir con todos esta página más que interesante: http://www.unaracnidounacamiseta.com/

En ella hay mucho humor y curiosidades lingüísticas, también literatura. La recomiendo para los que desean aventurarse por nuestra lengua en busca de nuevas ideas
y sorpresas.



martes, 22 de abril de 2014

Literalmente

La Ciudad despierta y se toma un café, en "La Mañana", diario local, cuentan que el señor Temperatura sufre por una pierna rota debido a Frío, quien le ha pegado. Al parecer Frío ya ha sido apresado por la policía y encontrado culpable de los cargos.
La Ciudad un poco más despabilada comienza a trabajar en su computadora, las Horas pasan y le dejan las cartas que han llegado a su despacho. Ella lee todas con atención y encuentra una que resulta realmente importante: "El Calor llegará la semana entrante, luego de que la ola delictiva de Frío hubiera sido detenida este otro malhechor habría sido informado de este terreno libre y habría decidido dejarse caer."
La Ciudad intenta no entrar en la oficina de Pánico pero termina haciéndolo, lo encuentra como siempre escribiendo descontrolado al grito de "AYUDAAAAA AYUDAAAAA". La Ciudad se detiene y grita "El Calor se acerca!". Pánico descuelga como rápido Bólido, un amigo de la infancia, el teléfono y "POLICÍIAAAAA CAPITÁN TEMPLADO NECESITAMOS SU AYUDA, EL CALOR SE ACERCA" pero antes de poder obtener una respuesta... 
"Señorita Ciudad, Pánico, mucho gusto soy El Calor, temido hasta por el Temor. Me he adelantado". Los trabajadores se abrazan justo cuando él saca su arma. Apunta y con un tiro certero hace explotar los sesos de La Ciudad y con ella a Pánico dejando así acéfala la oficina.   

martes, 15 de abril de 2014

Entre desiertos

El calor me mata, me desintegra, me descompone, quema tanto que hiela. Pero qué importa? Sigo caminando. Las ampollas en la piel revientan, sangran y vuelven a cicatrizar. Y yo, sigo caminando. La garganta se seca, se resquebraja, se hace papel y luego cenizas. Los espejismos bailan frente a mis ojos mostrando oasis de cielo, nublando la razón y confundiendo los miedos.
Un efrit esa noche sueña: era su fiesta de cumpleaños y el prestidigitador decía abracadabra y los pañuelos de colores desaparecían de sus manos. Cuando despierta yo estoy ahí, entre sus dunas, rojo de sangre y sol, brillante cascarón casi vacío. Él, saboreando las oportunidades de mi aparición, me pregunta "Caminante insensato que hierves tu ser en este desierto, cuál es tu mayor deseo? He soñado con magia y quiero cumplirla" Yo, con vos ronca de quien no habla contesto: "Agua y alimento, fresco y reparo, por favor."
"Un pago deberás otorgarle a este mago, puesto que no solo de arena vivo" responde el negro efrit. "Deberás peregrinar por estas tierras tres meses todos los años y yo, el más grande de los genios, te concederé el paraíso los otros nueve." Sabiendo cercana mi muerte, acepto.
Todo esto no es pavada y se me pasa por la cabeza por culpa del olor a pasto cortado cuando el malvado ya me apresa en su paraíso.

martes, 8 de abril de 2014

El sueño turbulento locomotor de todo, realidad e irrealidad entrelazadas como una.
La epidermis se hiela frente a tanto abismo y el ser se paraliza con asco.
Rojo jugo, granada que explota, lluvia.
Ya como camaleón camina, el mundo se funde en negro, cine trágico para dos.

Contará el cuento o seguirá hablando de amapolas?

viernes, 21 de marzo de 2014

Carnaval Sangriento.

Admirar al poderoso, olvidar tu pasado. Si pueden seguir esta norma, sean bienvenidos.
 ¿Podrás pisarle los talones al éxito e ignorar tu miseria? Esa será nuestra primera atracción. 
La montaña rusa de la vida, quien no deja sobrevivientes, marea a sus víctimas con el fin de confundir sus pensamientos y hacer que vomiten sus incoherentes ideales. 
 Pasen y vean, la posibilidad de intoxicarse en aquél mundo super-poblado es totalmente gratis, solo por hoy y toda la eternidad
La Casa de la Hipocresía y Mediocridad los espera, donde millones de espejos gigantes te mostrarán la realidad de tu grotesco ser mediante tu propio reflejo. 
 ¿Qué son esas lágrimas? ¿Acaso estás lamentando este desastre? Ya es muy tarde. Aquellos payasos son los que nos gobiernan y nos matan día día, esos causan escalofríos en vez de risa. ¿Estás entendiendo el propósito de esta fiesta macabra? 
 La sangre derramada de quienes han luchado por nosotros, ya se ha evaporado. Ahora solo quedan los que disfrutan a costa de los que sufren, los que comen y tiran las sobras y los que condenan al muerto en vez de si quiera juzgar al asesino. 
 Bienvenido a este carnaval sangriento. No es gratis, se paga con la vida.

jueves, 20 de marzo de 2014

El sol de la Tierra

¿Sabés no quejarte del ruido,
sin dejar de gritar?
¿Sabés qué te está sosteniendo
o eso está bajo tus pies?
¿Creés en la vida fuera del planeta
o le temés a la gravedad?
Y aunque no quieras,
yo también puedo hablar.
Lo lamento, yo también puedo hablar.
Y aunque decís que te suelo quemar,
podés fíjarte en dónde estás,
es que si el sol es de la Tierra,
yo solo puedo girar.
No importa cuánto te lastimen,
no importa cuánto te cueste,
de nada; pronto me llegará.